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| Śvāsa Gaharā |
Vuelvo a dar con lo mismo una y otra vez; no he aprendido aún.
Me vuelvo gris con mi propia materia y tiemblo bajo su efecto.
Me calmo, me exalto, me contengo, me distraigo, no respiro, me miro.
Juzgue usted si por su sabiduría ve las cosas con la suficiente claridad
en este día agitado por las hojas cayendo y deteniéndose en el tiempo.
Todo se agita y se retuerce ante mis ojos perplejos.
Veo como si todo fuera un sueño o algún pensamiento.
Acciones inconscientes.
Sólo me queda respirar lo más profundo que pueda y sentir...
Cuando recorre mi cuerpo, cuando viaja desde mi cuello hasta brazos y piernas,
cuando me distraigo y dejo las cosas de lado, cuando respiro, respirar, inhexalar.
Sólo tengo que tener una respiración profunda.
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